La nueva cupula de citroen ejecutara los 11000 despidos propuestos por Streiff en su mandato.
Las puerta de PSA Peugeot Citroën siguen abiertas para que 11.000 trabajadores abandonen voluntariamente el grupo a lo largo de este año. El despido de Christian Streiff, ex presidente y padre ideológico del plan de bajas que ya le ha costado a la multinacional 18.000 empleos, no va a detener el proceso. La nueva cúpula directiva, que estará encabezada por Philippe Varin, asumirá el ajuste diseñado por Streiff para aligerar unas plantillas sobredimensionadas, sobre todo en Europa, en donde la producción ha bajado un 40%.
«Todos los planes iniciados siguen en marcha», confirma la multinacional desde su sede central en París. «La prioridad sigue siendo salir de la crisis y el objetivo, recuperar beneficios», explica el constructor.
De momento, el presidente en funciones, Roland Vardanega, sigue adelante con el recorte de plantilla planificado por Streiff que se ha hecho extensivo a todas las plantas del grupo.
Despidos en Brasil
La sangría de empleo llegó ayer mismo al otro lado del Atlántico, donde 250 empleados de la planta brasileña de Porto Real (estado de Río de Janeiro), que estaban de vacaciones remuneradas desde enero, se han quedado en la calle, como consecuencia de la caída de la demanda. En la factoría brasileña trabajan 3.000 empleados.
Por lo visto, y por lo confirmado a través de la dirección, los trabajadores franceses tienen también muy claro que Philippe Varin no va a frenar la eliminación de empleo, «porque ya sobraban manos antes de la crisis y ahora la caída de producción no ha hecho más que agravar el problema. Esperemos, por lo menos, que no vaya a más», afirma Michael Bordeau, secretario general de la CGT en la factoría de PSA en Rennes (Bretaña francesa). «El plan consiste en bajar la capacidad de las plantillas a propósito y eliminar la mano de obra más cara, para que cuando llegue el momento del repunte queden menos trabajadores y más baratos», afirma Bordeau.
Gracias a la «voluntariedad» de la medida, PSA, que ha recibido del Estado créditos blandos por valor de 3.000 millones a un plazo de 5 años y una tasa de interés del 6%, sorteará las condiciones impuestas por el presidente Sarkozy a la industria de la automoción gala para recibir apoyo financiero público: no cerrar fábricas en Francia ni realizar despidos en un lustro.
Reajuste en Vigo
El grueso de este gran pelotón de bajas, entre 6.000 y 7.000 empleados, ya ha comenzado a salir de las factorías francesas y el resto lo harán de las filiales europeas, entre ellas, el centro de producción de Vigo, cuya plantilla, actualmente integrada por 7.700 trabajadores, se quedará en 6.500, en lo que hay que incluir los 900 efectivos que se marcharán con el cierre del turno de noche el próximo 30 de abril, según ha confirmado el propio director de Vigo, Pierre Ianni, quien ha asegurado que no habrá despidos, sino que la mayor parte de las bajas se materializarán a través de prejubilaciones.
Desde finales del 2008 la marcha de trabajadores mayores de 58 años de las instalaciones viguesas ha sido lenta pero constante. Mucho más brusco está resultando el proceso de adelgazamiento de plantillas en Francia. «Más de 600 empleados de PSA deberán haber firmado su partida hoy [por ayer, último día de marzo]», explica el sindicalista de la CGT de Rennes.
La factoría tiene 8.000 empleados. «La dirección sigue adelante con su plan para eliminar 1.750 puestos de trabajo este año, ya sea en virtud de la salida voluntaria, o en el marco de los traslados a otras plantas», afirma. En el 75% de los casos, se trata de una salida definitiva del grupo PSA, el 15% restante están dispuestos a trasladarse.
Turno de noche de Faurecia
Los proveedores de la multinacional francesa continúan encajando los efectos de la fuerte bajada de producción de su cliente. Ayer la multinacional Faurecia, filial del grupo PSA, confirmó la supresión del turno de noche en la factoría Asientos de Galicia, del Parque Tecnológico de Vigo, en el que trabajan un centenar de empleados.
«Por razones de fuerza mayor se suprimirá el turno de noche en Vigo», confirmaron a La Voz fuentes de la multinacional de componentes. Sobre el coste laboral que tendrá esta medida, que podría hacerse extensiva también a una segunda factoría instalada en Vigo especializada en escapes, la empresa se limitó a afirmar que, de momento, el proceso abierto se encuentra en fase de negociación con los sindicatos.